Dios no excluye a nadie de su amor, pero toma partido por el débil. Hoy, nosotros también estamos llamados por Él, a tomar partido por los necesitados y víctimas de nuestro mundo
Dios no excluye a nadie de su amor, pero toma partido por el débil. Hoy, nosotros también estamos llamados por Él, a tomar partido por los necesitados y víctimas de nuestro mundo