Hola, un cordial saludo, quisiera felicitar a Salvador Sostre, que escribió el artículo sobre el obispo.., y comentarle que aquí en Medellín, Colombia, yo como sacerdote vivo una situación igual. Muchas gracias. Andrés.
Hola, quiero agradeceros de todo corazón el trabajo inmenso que hacéis para transmitirnos los mensajes que cada domingo del año nos ofrece la liturgia. Comulgo totalmente con vuestras ideas y forma de presentar de todo lo que concierne a Feadulta. Todo ese material que nos mandáis cada semana nos sirve para profundizar en la fe y en nuestro trabajo de vivir el Reino de Dios de una forma diferente a la que estábamos acostumbrados. Que sigáis adelante con ese proyecto alimentando nuestro espíritu, para vivir con autenticidad el Evangelio de Jesús de Nazaret. Muchas gracias, de nuevo, por todo ese material tan bueno que ponéis en nuestras manos, en el que participan grandes maestros de espiritualidad con nuestro Obispo de Roma, Francisco, al frente. A ver si tiene suerte para dar nuevo aire a esta nuestra Iglesia que está, hace ya bastante tiempo, fuera de juego. Un abrazo. Demetrio. Gipuzkoa.
Doy gracias a la Divinidad por haberlos encontrado...!! Soy protestante, bachiller superior en teología, soy una persona que pertenece a la diversidad sexual. En fin... he leído algunos artículos de ustedes y me sentiría muy honrado recibir sus novedades. Les deseo bendecida Navidad y Paz, Bien durante todo el 2014 y siempre. Roberto. Buenos Aires.
Rafael, me uní a su página de facebook . Leo textos de E. Tolle y leí todo Tony de Mello, mucho de Anselm Grun, de todos esos y muchos más. Yo me eduqué en colegios del Opus Dei, nunca fui miembro, ni mi familia. Me mandaron porque eran buenos colegios. Mi fe se vio impregnada de dogma, regla, culpa. Gracias a Dios... rompí con todo ... Hace mucho Incluso con Dios... O más bien con el concepto que tenia de Él. Soy un gran buscador. Con fe adulta y enriquecida con otras espiritualidades, pero a Jesús le quiero y le abrazo. Veo que estamos en sintonía y algún día querría conocerles. Un abrazo desde Ginebra, Luís.