El profeta Isaías nos ha recordado el sueño de Dios: una humanidad capaz de convivir en paz y fraternidad. Es sueño de Dios, contamos con su Gracia, a nosotros nos toca poner nuestra parte...

Padre, que seamos "camino hacía Dios"

• Por los discípulos de Jesús, que la paciencia a la que nos invita el apóstol Santiago no nos conduzca a dejar de trabajar por hacer posible el Reino aquí y ahora.

Padre, que seamos "camino hacía Dios"

• Por los que tenemos la responsabilidad de enseñar: padres, profesores, catequistas, educadores. Que busquemos formar solidamente por dentro a nuestros niños y jóvenes.

Padre, que seamos "camino hacía Dios"

• Por los que trabajan con los que sufren: en residencias, hospitales, en caritas, para que sean el rostro, los brazos y el corazón de Dios.

Padre, que seamos "camino hacía Dios"

• Por los que no pueden sentir la vida como un regalo, que encuentren en nosotros y en los que les rodean motivos para la esperanza.

Padre, que seamos "camino hacía Dios"

• Por todos los hombres y mujeres que entregan su vida día a día a favor de los más desfavorecidos, que la esperanza de este tiempo mantenga viva sus esperanzas en un mundo más justo y fraterno.

Padre, que seamos "camino hacía Dios"

Padre, mantén nuestro corazón despierto, que con nuestras vidas seamos recuerdo cálido de tu Amor y ternura para con nosotros. Gracias por ser nuestra esperanza.

Vicky Irigaray